Mis besos serán lujuria y tempestad...

Vamos a olvidar viejas reliquias
que a nuestros cuerpos somete aprisionado
y tengamos nuestras pieles a la vista
y el corazón sin censuras del pasado.

Que quiero contemplar tu desnudez
y gozar de tu cuerpo y tu hermosura
y quedarme dormitando de placer
al besarte los pechos y tu cintura.

Y tus labios me beban cada sendero
y tus manos me templen con tu pasión
que tus caricias me lleven hasta el cielo
y que dejes rendido a mi corazón.

Mis besos serán lujuria y tempestad
que en tu cuerpo desato para gozar
y escuchar los gemidos de tu garganta
y temblando tu cuerpo te haga llorar.

Si en este domingo por fin pudiera
tenerte desnuda y abrazar tu cuerpo
habría más semana que yo quisiera
tener esos recuerdos en mis pensamientos.

Ángel Reyes Burgos

Con la mano tendida...

Se hicieron serpientes las letras de mis poemas
en esos días antiguos de mi soledad
y un inmenso vacío llenaba mis penas
y la angustia en mi pecho, no sabían llorar.

Mi cuerpo en letargo, mi habitación solitaria
bandadas de gorriones agitando pasiones
mi pluma escribiendo sobre fantasías
carente de cariño, amor e ilusiones.

El alma doliendo y las lágrimas secas
bebiendo en mi soledad un cáliz amargo
vino de los desprecios de cicuta añeja
de mil aventura y cien desengaños.

Los gorriones se fueron dejando mi angustia
cien mariposas blancas poblaron mi alma
una situación nueva y milagrosa
me llenó la vida de amor y calma.

Allí estaba ella con su mano tendida
una nueva luz comenzó a brillar
devorando las tormentosas heridas...
me dio un nuevo camino de amor y paz.

Hoy y sin rodeos...

Libera tus pechos hermosos
de la prisión que los cubre
que quieren contemplar mis ojos
tu belleza y mansedumbre...

Belleza en tus redondeces
la mansedumbre en mi boca
cuando tus guindas se crecen
y mi pasión se desboca...

Yo jugaré con mis dedos
dibujando tus aureolas
y besaré con mis sueños
el rubor de tus corolas.

Mis manos serán sostenes
para siempre sostenerte
mis ojos serán sainetes
para sentirte y tenerte.

Descubre tu hermoso pecho
sin pudor y sin rodeos
y librame de este antojo
de beber de tus deseos...

Hoy vengo a recordarte...

Hoy vengo a recordarte
con las letras de mis versos
que eres de mi vida parte
cuando despierto te sueño.

En este calor de domingo
antes de mi siesta aciaga
por no tenerte conmigo
ni el calor de tu mirada.

Dormitaré en la penumbra
cobijandome en tus alas
reflejándose en la sombra
tu ternura apasionada.

Y he de beberte en silencio
y he de comerte despacio
y expandirme consumiendo
la sabia de tu regazo.

A ti Ángel mío te digo...
otro domingo te tengo
aún sin tenerte conmigo
te llevo siempre muy dentro.

Ángel Reyes Burgos

Navegando en alta mar...

Vamos a hacer ese crucero
que tantas veces soñamos
pensaré que estoy en el cielo
si me coges de la mano.

Y al son de un dulce bolero
en la proa voy a cantar
cuando se asome el ocaso
con el barco en alta mar.

El capitán nos ha llamado
para la cena de gala
los mariachis han tocado
para mi novia adorada.
Una lágrima se escapa
la emoción esta servida
y mi corazón galopa
con mis ilusiones cumplidas.

De gala se abre ese baile
y abrazado a tu cintura
siento que floto en el aire
al hacerse la penumbra.

Y abro los ojos y me encuentro
abrazado a mi almohada
soñando estaba despierto
que junto a ti navegaba...




Recuerdame en soledad...

En la soledad de tu camarote
o en el fragor del casino
o si en la ducha te metes
allí estará mi destino.

Susurrando mil te quiero
cien caricias voy a darte
y una nube desde cielo
cogeré para bajarte...

Y en esa nube mi amada
voy a desnudar tu cuerpo
a salvo de las miradas
de los halcones del tiempo.

Beberé de tu hermosura
el dulce néctar candente
para vivir esta locura
que me produce la muerte.

Recuerdame en soledad
cuando sedienta de besos
tu alma quiera gritar
por estar de mi tan lejos.

Ángel Reyes Burgos
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