Soy quien soy, no soy un ángel...

Sabes que no soy Jesucristo 
y que estoy lleno de defectos
pero con mis ojos te miro
con halos de amor y misterio.

Y con mi pluma escribiendo
sostengo tu amor y tu vida,
versos para quitarte el dolor
otros para curar tus heridas.

Soy quien soy, no soy un ángel
y estoy de defectos lleno
pero para curarte y curarme
tengo sentimientos tiernos.
Quiero que leas cada poema
con los ojos de tu alma
veras que te llenan de calma
y de caricias soñadas.

Tu sabes que voy a sostener
tu cuerpo y tu corazón
cuando te hagan caer
llenandote de dolor.

Y aunque no soy Jesucristo
tengo este amor tan grande
que cuando sufras mi amor
yo estaré para cuidarte.
















Quedate en mi corazón...

Desbordate en mi corazón y ocupa entero
cada recóndito paisaje que en el suspira
despliegate que dentro hay un cielo
y ocupa cada espacio cuando estés vencida.

Fuente es para la sed de tus besos
cálido nido para romper tus cadenas
la cura perfecta cuando el tuyo herido
sucumba sin fuerzas, desangrando tus venas...
Ese será el territorio de tus guerras
cuando las batallas no puedas ganar
búnker reforzado de acero y piedras
donde te sientas segura, para poder soñar.

Este será tu nido, tu patria y el olivo
que sustente a tu alma soñadora,
quedate por siempre en mi corazón cautivo
y besame corazón a todas horas...











Hazme tu prisionero...

No dejes que corra el aire
entre tu boca y mi boca
y que en mi pecho se plante
las ansias que me provocas,
apurate y no te tardes,
bésame con ansias locas.

No ves que estoy tan sediento
de tus besos y tus gemidos,
no ves el amor que yo siento
y me siento tan perdido
si no me besas al momento
y me dejas estremecido.

No me hagas esperar más,
planta tus labios en mi pecho
no me hagas suplicar
y sujeta bien mis manos
para poderte besar
sintiéndome encadenado.

Que quiero ser tu prisionero
que en tu pecho ardiente clame
que me subas hasta el cielo
mientras mis labios te amen.

Y cuando estemos en el cielo
te voy a hacer mi prisionera
sujetandote por el pelo
agarrado a tus caderas...

Ángel Reyes Burgos

Hoy vi una cara sonriendo...

Cuanta dulzura reflejan...
donde quedará la ternura
cuando la vida ya añeja
pintan rostros de amargura.

¿Es que se va la inocencia
y en cada lágrima vertida
las arrugas son heridas
que asolan nuestra conciencia?.

Hoy vi una cara sonriendo
que me miraba de frente
y cuando viejos ya somos
ya no hay sonrisas presentes.
Como quisiera volver
a esa infancia postrera
donde tanto padecer
solo sea una quimera.

Por eso cuando los miro
esos rostros tan hermosos
con lágrimas de felicidad suspiro
aunque me lloren los ojos.

Y hay cuando me tiran un beso
con sus pequeñitas manos
aunque sea desde muy lejos
me siento un niño mimado...
















Sorprenderte en la mañana...

Me gusta sorprenderte
cuando aún estás dormida
darte besos dulcemente
en tu boca adormecida.

Despertarte en la mañana
con un café recién hecho
y las rosas de mi alma
plantarlas sobre tu pecho.

Que feliz amanecer
cuando los ojos tu abres
y ves en los míos crecer
en pasiones interminables.
De lado pones el desayuno
y a mi me cubres con besos
nos fundimos en solo uno
dejando los cuerpos presos.

El sol se pone en lo alto
nuestros cuerpos están ardientes
de nuevo te entra el deseo
de un desayuno caliente.

Como el nuestro se ha enfriado
vuelves a besarme en la boca
y de nuevo has empezado
sobre mi, a volverte loca...
















Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...