Que mal me acostumbraste...

Hay veces que me derroto
por esta vida tan dura
pero cuando miro tus ojos
me lleno de nuevo de vida...

Y todo se vuelve amable
cuando tus labios me rozan
y mi alma se estremece
cuando con amor me nombras.

Es que el mundo es diferente
cuando yo cuento contigo
y con cariño me quitas
las piedras de mi camino...
Que mal me acostumbraste
con tanto amor y simpatía
pues ya no puedo dejarte
que sin ti me moriría...

Pero no hablemos de dejarnos
si la vida sin tenerte
la siento más como herida
que me causará la muerte...

Hoy solo quiero ruidos
que me lleguen de tu alma
como luceros encendidos
que me inunden de tu calma.






No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...